A veces te hundes caes
en tu agujero de silencio,
en tu abismo de cólera orgullosa,
y apenas puedes
volver, aún con jirones
do lo que hallaste
en la profundidad de tu existencia.
Amor mio, qué encuentras
en tu pozo cerrado?
Algas, ciénegas, rocas?
Qué ves con tus ojos ciegos,
rencorosa y herida?
Mi vida, no hallarás
en el pozo en que caes
lo que yo guardo para ti en la altura:
un ramo de jasmines con rócio,
un beso mas profundo que tu abismo.
No temas, no caigas
en tu rencor de nuevo.
Sacude la palabra mia que vino a herirte
y déjala que vuele por la ventana abierta.
Ella volverá a herirme
sin que tú la dirijas
puesto que fue cargada con un instante duro
y ese instante será desarmado en mi pecho.
Sonriéme radiosa
si mi boca te hiere
no soy un pastor dulce
como en los cuentos de hadas,
sinon un buen leñador que comparto contigo
tierra,viento y espinas de los montes.
Ámame tú, sonríeme,
ayúdame a ser bueno.
No te hieras en mi, que será inútil,
no me hieras a mi porque te hieras.
Pablo Neruda.
quinta-feira, 30 de setembro de 2010
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